Desde que irrumpió la pandemia, las exigencias y dificultades para aquellas empresas que se dedican al servicio logístico han aumentado, por lo que han tenido que reinventarse e incorporar nuevas tecnologías. En este contexto, las herramientas como los robots, algoritmos u otras tecnologías inteligentes, son una alternativa cada vez más accesible para aquellas compañías que se dedican a la distribución de productos.
El Country Manager, Rodolfo Morales, de la startup Drivin comentó que “la visión que puede tener una persona al planificar una ruta es muy limitada si se compara con los algoritmos que utilizamos, que incorporan múltiples variables logísticas como: ventanas horarias, tráfico, tiempos de servicio, jornada laboral, características y capacidad de los vehículos, entre otras, es decir, hay una gran cantidad de variables que podemos incorporar al momento de planificar y es imposible que una persona tenga la capacidad de procesar todos esos datos para armar rutas eficientes”.
Uno de los principales beneficios de incluir estas tecnologías, es que además, de las reducciones en los costos de transporte (que pueden llegar a un 30%) se reduce de manera significativa las emisiones de dióxido de carbono. “Los procesos logísticos al incorporar inteligencia artificial tienen como resultado asignaciones idóneas de vehículos, un armado de ruta eficiente y óptimo; lo que se traduce en menos vehículos y menos kilómetros recorridos.
Por consiguiente, los algoritmos y «la inteligencia logística, son una real alternativa para que las empresas que hacen distribución de productos puedan mejorar y reducir sus impactos de la huella de carbono”, agregó Morales.
El aprendizaje automático y los sistemas logísticos permiten liberar trabajo al operador, pero también requieren de un equipo que se responsabilice de su correcta implementación. En este sentido el Country Manager de Drivin, recomendó que “las compañías den importancia a este tipo de proyectos, dado que la decisión no pasa sólo por decidir implementar un software«.
Remarcó que, «debe haber una gestión del cambio interna, que debe venir de gerencia, en el que se establezcan los objetivos de la organización: reducciones de costos – reducción de las emisiones de CO2 – transformación digital entre otros”.
Finalmente, el experto en logística comentó que estas tecnologías no van a reemplazar a las personas, “esto no quiere decir que vamos a prescindir de la gente, sino que más bien las personas que operan en estas áreas van a destinar su tiempo a labores más productivas, más estratégicas y menos operativas”.
Fuente: www.mascontainer.com