Sudamérica intensifica sus esfuerzos para convertir el litio en baterías

Argentina, Chile, Bolivia, Brasil se están orientando en la fabricación de vehículos eléctricos.

Los países de Sudamérica están intensificando sus esfuerzos para avanzar en la cadena de suministro de vehículos eléctricos, aprovechando su enorme riqueza mineral, ampliando la capacidad de procesamiento y orientándose a la fabricación de autos más ecológicos, según reporta Bloomberg.

Argentina, Chile, Bolivia y Brasil tienen previsto coordinar sus acciones para convertir una mayor cantidad del litio extraído en la región en productos químicos para baterías y su posterior fabricación. Asimismo, están indagando en la elaboración de vehículos eléctricos, según la subsecretaria de minería de Argentina, Fernanda Ávila.

Este impulso en las principales regiones productoras de Sudamérica refleja la tendencia mundial de los países ricos en recursos a abandonar el mero suministro de materias primas para dedicarse a actividades de mayor valor añadido que impulsen el crecimiento, aumenten los ingresos y saquen el máximo partido de sus recursos.

En Asia, Indonesia, potencia en materias primas, ha expuesto su ambición de convertirse en un centro mundial de baterías para vehículos eléctricos a medida que se dispara la demanda de un transporte más ecológico.

«Tenemos que prepararnos para lo que está por venir y ser capaces de adaptarnos, empezando quizá por las células, avanzando hacia la industrialización y llegando a las baterías», declaró Ávila en una entrevista desde Toronto, donde forma parte de la delegación argentina que participa en la Convención anual de la PDAC.

Impulso de la industria en Latam

El llamado triángulo del litio, formado por Argentina, Chile y Bolivia, representa más de la mitad de los recursos mundiales de dicho suministro, y tanto Brasil como Argentina tienen experiencia en la fabricación de automóviles. Esa podría ser la base de una plataforma regional de electromovilidad.

Hasta ahora, América del Sur ha tenido un éxito limitado en la producción de productos de litio de mayor valor, por no hablar de la fabricación de baterías o autos eléctricos a escala comercial. Pero la voluntad política, los cambios tecnológicos y las tensiones geopolíticas pueden contribuir a su impulso.

La guerra de Ucrania y la preocupación por el dominio chino de partes clave de la cadena de suministro están acelerando la fragmentación de los lazos comerciales tradicionales y estimulando los esfuerzos por fomentar las industrias locales, especialmente las implicadas en la transición energética.

La Ley de Reducción de la Inflación de EE.UU., que el presidente Joe Biden promulgó en agosto, está empujando a los fabricantes de vehículos más ecológicos de todo el mundo a aumentar su producción en Norteamérica y asegurarse los minerales clave para ellos fuera de China, en particular en naciones con acuerdos de libre comercio con EE.UU. como Chile y Australia.

Inversiones extranjeras

Argentina está presentando su caso para la inclusión del IRA, a pesar de no tener un TLC con EE.UU.. Pero la atención se centra en añadir valor en casa, dijo Ávila. El país ha creado un grupo de trabajo con sus tres principales provincias mineras de litio, al que recientemente se han incorporado otras entidades gubernamentales y representantes del sector privado. El grupo ha empezado a debatir la reserva de cuotas de litio para uso nacional, cuyos precios estarían probablemente vinculados al mercado «pero de algún modo preferenciales».

El fabricante de automóviles chino Chery Inc. quiere construir una planta de vehículos eléctricos y baterías de US$400 millones en Argentina, en medio de la fiebre por el suministro de litio andino.

Jujuy, una de las tres zonas productoras de litio del país trasandino, está en conversaciones con una empresa de China para fabricar cátodos de baterías en la provincia, según el gobernador Gerardo Morales. Jujuy también está trabajando en un marco provincial más amplio que incluya recortes fiscales para atraer inversiones.

La idea es sentar las bases para la fabricación local de baterías, y las empresas chinas Ganfeng Lithium Co. y Gotion High-tech Co. ya han manifestado su disposición a colaborar. También hay mucho interés por parte de empresas europeas, asiáticas y estadounidenses, según Avila.

«Añadir valor es fundamental para nosotros», afirmó. «Sabemos que el sector está creciendo y que hay mucha presión y volatilidad de precios. Pero se trata de aprovechar al máximo esta ventana de oportunidad, no sólo enviando carbonato de litio».

Fuente: www.mundomaritimo.cl