El mercado del transporte aéreo de mercancías ha vivido últimamente una montaña rusa, pero en 2024 podría volver a la estacionalidad, según Xeneta, que ha publicado sus perspectivas para 2024.
El sector vio cómo el coste del transporte aéreo de mercancías se disparaba durante el periodo del Covid-19, para volver a caer en picado en 2023, aunque sigue siendo un 32% superior al nivel anterior a la pandemia.
La sensación de volatilidad persistirá durante un tiempo, destacando como factor clave para el próximo año el descenso del gasto de los consumidores. Los indicadores clave no son buenos desde el punto de vista de la demanda.
En concreto, la demanda de transporte aéreo de mercancías en 2023 sigue siendo un 8% inferior en comparación con los niveles pre-pandemia y sólo se prevé que crezca en un 1-2% en 2024. Al mismo tiempo, se espera que la oferta crezca en un 2-4% en 2024.
Los datos de Xeneta revelan una tendencia al alza de los contratos a largo plazo, una situación potencialmente peligrosa para los transitarios en 2024, pues venden contratos a largo plazo, pero compran la mayor parte del volumen en el mercado ‘spot‘. Si las tarifas suben, el problema es grave.
Ha ocurrido recientemente en Vietnam, donde el 70% del volumen se compra en el mercado ‘spot‘. Las tarifas se dispararon de repente antes de la ‘Golden Week’ y los transitarios dijeron a los cargadores que no podían cumplir el servicio contratado.
El informe de Xeneta también destaca la continua recuperación de la capacidad, que ejerce una presión a la baja sobre las tarifas, como un tema clave para 2024, junto con la sostenibilidad medioambiental y la mejora de la fiabilidad de los horarios en el transporte marítimo de mercancías.
En la consultora, creen que es importante no perder de vista la evolución del transporte marítimo, pues el 97% de las mercancías transportadas en contenedores se transportan por mar.
Dados los volúmenes implicados, si el sector marítimo se equivoca, aunque sea mínimamente, se puede ganar más dinero en el transporte aéreo. En este sentido, aunque la fiabilidad en el transporte marítimo está mejorando, basta un imprevisto para que la situación cambie y las tarifas aumenten rápidamente.
Basta con ver la sequía en el Canal de Panamá, la amenaza de erupciones volcánicas en Islandia o el conflicto en Oriente Próximo para comprender lo sensible a los acontecimientos mundiales que es el sector del transporte aéreo de mercancías. Por tanto, si en 2024 se produce algún suceso inesperado, continuará la volatilidad.
Fuente: www.mascontainer.com