Objetivo es iniciar la primera fase de licitación de obras a fines de 2025 o a inicios de 2026.
Con el fin de dar a conocer los avances y desafíos del Proyecto Puerto Exterior San Antonio, la Empresa Portuaria San Antonio (EPSA) sostuvo en la mañana del 8 de noviembre un extenso encuentro con la prensa. La cita, a la que asistió MundoMartimo, fue encabezada por el presidente de EPSA, Eduardo Abedrapo, mientras que la exposición estuvo a cargo del gerente del proyecto, Eduardo Simian, quien entregó los detalles de la obra, sus beneficios, montos de inversión, poniendo el énfasis en la necesidad del trabajo conjunto con las comunidades de la ciudad de San Antonio. También, en la oportunidad se destacó que se espera entregar la Adenda N°2 del proyecto en diciembre próximo y que se espera obtener la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) el primer semestre de 2025 e, idealmente, iniciar la construcción en 2028.
“El Proyecto de Puerto Exterior representa hoy día el proyecto de infraestructura de transporte más grande del país y capital para su desarrollo económico y social”, destacó, tras la exposición, Eduardo Abedrapo, quien indicó además que “siendo el Puerto Exterior un proyecto fundamental, nosotros tenemos también otras tareas que son: primero cuidar el actual puerto, mejorarlo, gestionarlo de una manera más eficiente posible y, por otro lado, mejorar las condiciones de la relación del puerto con la ciudad. Sabemos que la operación del puerto genera impactos diarios, muchos muy desagradables que hacen que haya una convivencia poco armoniosa”.
Ante esto, señaló que “hoy estamos impulsando proyectos muy importantes que buscan disminuir el tráfico de camiones de la ciudad, hacerlo más racional; estableciendo y gestionando centros de frecuencia de carga en la parte alta de San Antonio, antes de que ingresen a la ciudad de manera que el tráfico de camiones disminuya y sea eficiente”.
Adicionalmente, explicó, el 6 de noviembre se alcanzó pleno acuerdo en la conciliación para la declaración de los “Ojos de Agua” como humedales urbanos, faltando solamente la ratificación del tribunal. “Es una muy buena noticia porque esa es una zona de diversidad ecológica”, manifestó, destacando además que “de esta forma el desarrollo del puerto asegura una zona de resguardo ecológico”.
Mencionó también otros proyectos en que está trabajando EPSA relacionados con el desarrollo directo de la comunidad como el Paseo Norte, inaugurado hace algunos días, obra urbana que ya tiene un alto niel de ocupación y otros que tienen que ver con apoyo a clubes deportivos, centros de capacitación con lo que “se busca mostrar el compromiso de la empresa con el puerto y con el desarrollo de San Antonio”, acotó.
Plazos definidos
Abedrapo explicó que el mandato que recibió por parte del Gobierno de Chile “es dar la máxima celeridad al proyecto Puerto Exterior y eso implica darnos a la tarea de concluir los trabajos que tenemos que hacer en el menor tiempo posible”.
Detalló al respecto que “hoy estamos empeñados en entregar las respuestas a las adendas, estos son las observaciones que nos ha planteado el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) durante 2024. Si logramos contar con las respuestas este año, creemos que podremos obtener la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) y, efectivamente, llamar ya a la primera fase de licitación de obra [correspondientes al molo de abrigo] a fines de 2025 o a inicios de 2026”.
Si bien la comunidad realizó 3.000 observaciones al Proyecto, explicó que al ordenarlas y agruparlas “uno se da cuenta de que son muchas menos, porque se reiteran”. No obstante, indicó que los puntos más preocupantes son aquellos estudios técnicos ambientales- EPSA actualmente lleva a cao 55 análisis de este tipo- que necesitan mucho plazo porque, por ejemplo, implican hacer mediciones a lo largo de todas las estaciones del año, periodos que, por su puesto, no pueden ser acelerados. “Si logramos hacer esas mediciones durante 2024, efectivamente, el 2025 tendremos las respuestas suficientes para que el Sistema de Evaluación Ambiental quede tranquilo y podamos obtener rápidamente la RCA”, recalcó.
Otros desafíos involucran a los propios habitantes de San Antonio. Es el caso de los accesos al puerto que van a tocar algunas zonas pobladas en la parte baja y alta de la ciudad. “En las zonas en que el puerto debe tener conexiones con el ferrocarril, con la Ruta 78 y también con la Ruta de la Fruta, hay que hacer adaptaciones al proyecto que van a significar ocupar algunos terrenos, posiblemente realizar expropiaciones”, indicó Abedrapo.
Molo de abrigo
La construcción del molo de abrigo también generará impactos en la comunidad, debido a que implica el traslado de rocas mediante camiones; proceso cuyos efectos EPSA busca mitigar mediante la habilitación de canteras y caminos interiores con el fin de que estos vehículos pesados, que generan ruido y polución, no transiten por la ciudad. “Es imposible construir el molo de abrigo sin rocas, pero lo tenemos que hacer sin impactar, o mitigando, durante el periodo de duración de las obras”, señaló.
El presidente de EPSA planteó finalmente que las obras del molo de abrigo deberían tardar unos siete años y la construcción de los frentes de atraque de la Fase 1 tomarían otros tres. “Así el año 2036 esperamos ya estar moviendo los primeros barcos y carga en el Puerto Exterior de San Antonio”, proyectó.
Fuente: www.mundomaritimo.cl