La logística inversa se hace cargo de gestionar el proceso de devolución o reciclaje de un producto, desde la dirección entregada del cliente hasta el centro de distribución definido por la empresa. Según un estudio de Zebra Technologies, el proceso de logística inversa y sus costos de transporte, entre otros ítems asociados a la devolución de pedidos, representan un complejo desafío para el 83% de los minoristas en América Latina.
La importancia de la logística inversa radica en que si una empresa logra satisfacer las exigencias de sus clientes, incluyendo la devolución de un producto si así lo desean, mejorará su reputación y podrían aumentar sus ganancias; además, pueden destacarse ante la competencia con un servicio que mantiene felices a sus clientes.
“Las expectativas en torno a la experiencia de entrega, con el tiempo, se han convertido en un fenómeno verdaderamente global. El deseo del consumidor es experimentar entregas consistentes y transparentes en el momento adecuado. Y dentro de ese desafío, la gestión de la logística inversa cobra una relevancia mayor en la satisfacción del cliente”, sentencia Emilio González, Head of Sales de DispatchTrack para Sudamérica.
Para que la logística inversa sea efectiva, desde DispatchTrack indican que es esencial tener un proceso bien definido, comunicarse claramente con los clientes e integrar un software tecnológico de última milla que permita ofrecer un servicio eficiente en esta etapa tan crítica de la cadena de suministro. Entregan cuatro tips para llevar a cabo una logística inversa de manera exitosa:
Procesar la devolución: Las empresas deben tener en cuenta que proporcionar un proceso de devolución fluido y eficaz es tan importante como ofrecer un excelente servicio de entrega a los consumidores. Un proceso de devolución tedioso puede afectar la satisfacción del cliente y, por lo tanto, dañar la reputación de una empresa.
Determinar la categoría de devolución: Cuando un producto es devuelto, es importante simplificar el proceso de logística inversa con sistemas que identifiquen y categoricen la devolución antes de que llegue. Esto permite que la organización que utiliza el software de logística procese la devolución de manera rápida. A este proceso se le conoce como logística inversa de devoluciones, que implica devolver el producto desde el cliente final hasta el centro de origen. Esto puede deberse a insatisfacción del cliente, entrega incorrecta, producto defectuoso, entre otras razones.
Ejecutar el proceso de reparación: Los artículos reubicados en el departamento de reparaciones deben tratarse de manera oportuna para mantener su vida útil. Al reparar el artículo, rápidamente debe volver a introducirse en el inventario de la organización o desecharse si es irreparable. En caso de piezas o componentes específicos que aún pueden ser utilizables, estos deben venderse a los fabricantes para volver a crear nuevos productos.
Reciclar artículos que no se pueden reparar: Este proceso, llamado logística inversa de residuos, consiste en la recolección, reciclaje y tratamiento de los desechos generados por el producto final después de su comercialización. La finalidad es reducir el impacto ambiental de dichos residuos, y también para cumplir con el objetivo logístico de reutilizarlos como materias primas, repuestos, etc.
Fuente: www.emb.cl