De acuerdo a las cifras entregadas por ProChile, los envíos de este producto al exterior registraron un aumento del 26% en comparación con el mismo período del año anterior.
En un año marcado por desafíos globales en la producción de aceite de oliva, la región del Maule se ha destacado como un actor resiliente y de alta calidad en el mercado internacional. Según datos recientes entregados por ProChile, las exportaciones de aceite de oliva chileno han experimentado un crecimiento significativo.
Durante los primeros nueve meses de 2024, las exportaciones de aceite de oliva alcanzaron los US$ 103 millones, lo que representa un aumento del 26% en comparación con el mismo período del año anterior. Este crecimiento ha sido impulsado principalmente por la demanda de mercados clave como Brasil y Estados Unidos.
“La paradójica situación de exportar a países productores se explica por la severa escasez de aceite de oliva que ha afectado al mercado global en los últimos dos años. Las malas cosechas, atribuidas en gran medida al cambio climático y a prolongadas sequías, han impactado significativamente a los principales productores, incluyendo a España y Australia. Esta crisis ha abierto oportunidades para países emergentes como Chile, que han demostrado su capacidad de llegar con un producto de primerísima calidad”, destacó la directora regional de ProChile en Maule, Carmen Gloria Cerda.
La directora regional de ProChile Maule enfatizó la posición privilegiada de Chile en este contexto. «Ante esta crisis mundial en la producción de aceite de oliva, Chile ha destacado como un productor confiable y de alta calidad, aunque también enfrenta los problemas climáticos que afectan a esta producción», declaró.
Juan Aguirre Saud, Gerente Comercial de Olivares de Quepu, una de las empresas líderes en la producción de aceite de oliva en la región del Maule, compartió su perspectiva sobre el crecimiento del sector. «Nosotros tenemos una superficie de 1.000 hectáreas, de las cuales 760 hectáreas están plantadas con olivos. Aproximadamente 40 hectáreas son de aceituna de mesa y el resto para aceite», explicó Aguirre, destacando la diversificación de su producción.
Aguirre también hizo hincapié en la estrategia de comercialización de la empresa: «Además de satisfacer el mercado interno, exportamos productos envasados a Brasil y tenemos clientes cautivos en Estados Unidos. Aunque los precios han subido, nos estamos consolidando cada vez más como productores de aceite de alta calidad».
El ejecutivo comparó el potencial del aceite de oliva chileno con el éxito logrado por la industria vitivinícola del país. «Internamente tenemos que tratar de ser como el vino chileno, reconocido mundialmente por su calidad. Ese es nuestro objetivo final: ser reconocidos globalmente como productores de aceite de oliva de excelencia», afirmó Aguirre.
A pesar de ser un actor relativamente nuevo en el mercado mundial del aceite de oliva, con poco más de dos décadas de presencia significativa, Chile ha logrado posicionarse rápidamente. Aguirre señaló: «Por algo están viniendo desde Europa y Estados Unidos a comprarnos. Saben que aquí tienen calidad. No solo Olivares de Quepu, sino muchos de los productores serios que vemos acá ya están posicionándose como actores de calidad de aceite de oliva».
La directora regional de ProChile pidió valorar que productores líderes mundiales en aceite de oliva estén llegando a Chila a comprar ese producto: «El primer país al que se dirigen para buscar aceite de calidad es Chile. Y ese es un reconocimiento al trabajo de varias décadas de los productores».
“Este auge en las exportaciones no solo representa una oportunidad de beneficio económico para la región del Maule y para Chile en general, sino que también subraya la creciente reputación del país como productor de aceite de oliva de clase mundial, que como ProChile vamos a estar destacando en las principales ferias internacionales de alimentos”, concluyó Carmen Gloria Cerda.
Fuente: www.agendamaritima.cl